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Alteraciones de las uñas: ¿siempre son hongos?

Las alteraciones ungueales, también llamadas onicodistrofias son un problema muy frecuente. Pueden producir molestias pero principalmente se trata de un problema estético.

Por algún motivo, en la sociedad se tiende a culpar a los hongos de todas las enfermedades de las uñas. Pero lo cierto es que la mayor parte de las veces las onicodistrofias o alteraciones ungueales son debidas a muchas otras razones.

Existen numerosos factores exógenos y endógenos que pueden afectar a nuestras uñas.

Los traumatismos o microtraumatismos continuos, productos que nos apliquemos como esmaltes, quitaesmaltes, lavarnos mucho las manos, agentes irritantes , tics, manipulación de cutículas, morderse las uñas, etc pueden producir distintos tipos de alteraciones ungueales.

A veces, la onicodistrofia puede ser la primera manifestación de una enfermedad cutánea o acompañarla.

Por otro lado, las uñas nos trasmiten mucha información de lo que le sucede o ha sucedido al organismo. Pueden reflejar algunas enfermedades sistémicas, como enfermedades respiratorias , hepaticas y renales, haber pasado una infección general hace unos meses , toma de fármacos como la quimioterapia o un déficit vitamínico.

Onicomicosis: infección de una uña por hongos de tipo dermatofito
Onicomicosis: infección de una uña por hongos de tipo dermatofito

Las infecciones fundamentalmente por hongos y bacterias también pueden producir alteración en la estructura ungueal.

Como hemos explicado, no todas las alteraciones que aparecen en las uñas son hongos, aunque es lo primero que se suele pensar cuando una uña aparece alterada.

Hay que realizar una cuidadosa exploración de las uñas y de la piel así como solicitar las pruebas necesarias en función de la sospecha clínica. Ante la sospecha de una micosis (infección por hongos) o ante dudas diagnósticas es aconsejable realizar un cultivo de hongos.

Voy a hablar de las onicopatias más frecuentes que vemos en la consulta en el día a día.

Una causa muy frecuente de consulta es la onicodistrofia traumática. Generalmente es secundaria a traumatismos o microtraumatismos crónicos con los zapatos, favorecida por el uso de zapatos ajustados con punta estrecha y tacón , determinado calzados usados en el ámbito laboral y la práctica de algunos deportes como correr, andar o jugar al tenis.

Las uñas dañadas por traumatismos crónicos se pueden volver blanquecinas, amarillentas e incluso engrosadas. A veces aparecen pequeños hematomas subungueales (sangre debajo uña). Son especialmente propensas a alterarse las uñas del primer dedo de ambos pies, muchas veces de forma simétrica.

Micosis ungueal u onicomicosis. Es debida fundamentalmente a la infección de las uñas por hongos de tipo dermatofitos. Suele haber factores predisponentes como humedad, deportistas, uñas ya alteradas previamente, enfermedades generales que creen predisposición a infecciones por hongos (inmunosupresión, diabetes mellitus…).

Aparece principalmente en las uñas de los pies. Suelen aparecer uñas engrosadas con zonas blancoamarillentas. No suele afectarse las uñas de forma simétrica a diferencia de la traumática. Tiende a aparecer en la zona distal y lateral de la uña para extenderse posteriormente por toda la uña e incluso afectar uñas adyacentes si no se tratan.

Alteraciones de las uñas en la Psoriasis
Alteraciones de las uñas en la Psoriasis

Algunas enfermedades de la piel también afectan a las uñas , especialmente la psoriasis, apareciendo las típicas “ manchas en aceite” , el engrosamiento de las uñas tanto de manos como de pies así como el “pitting” o punteado sobre la lámina ungueal. El liquen plano también afecta con frecuencia las uñas apareciendo onicolisis (rotura de la uña) distal y estriación severa de las uñas.

En muchas ocasiones estas entidades son difíciles de diferenciar incluso para nosotros los dermatólogos y hay que realizar un cultivo de hongos o solicitar alguna prueba de imagen como la ecografía, la resonancia o la radiografía.

Raramente, pero más grave puede ser debida a la presencia de un tumor subungueal como el carcinoma epidermoide o el melanoma acral.

Tratamiento de las alteraciones de las uñas (hongos y otras causas)

Ante una onicomicosis leve (cuando afecta a menos de un tercio de la uña) se debe realizar tratamiento tópico generalmente en forma de laca con ciclopiroxolamina o amorolfina durante varios meses.

Onicomicosis que afecta a varias uñas del pie
Onicomicosis que afecta a varias uñas del pie

En caso de mayor afectación ungueal se recomienda realizar tratamiento por vía oral , normalmente terbinafina o itraconazol de 4 – 6 meses . A veces hay que realizar tratamientos combinados.

Para otros tipos de onicodistrofia o alteraciones ungueales pueden emplearse cremas o lacas de urea a distintas concentraciones.

La uña puede tardar hasta un año en recuperarse por lo que a veces es necesario tomar complejos vitamínicos para ayudar al organismo a recuperar la uña original.

Dra. Elena Vera