Los antioxidantes son las sustancias que, de forma natural, usa el organismo para protegerse del daño generado por el metabolismo, la luz solar y la polución.

Existe un gran número de ellos como por ejemplo la vitamina C, la vitamina E, el selenio, el zinc, la silimarina, las isoflavonas de soja, los estrógenos, el polipodium leucotomus, los polifenoles del té, la luteína, el pycnogenol y el ácido kójico.

Las mayoría de las imperfecciones de la piel aparecen como consecuencia directa de la oxidación celular. La ingesta de vitaminas y sustancias antioxidantes es necesaria para que el cuerpo y la piel tengan los recursos necesarios para defenderse de los daños producidos en el ADN celular.

Cada día, las células de nuestro cuerpo se enfrentan a múltiples adversidades. Para luchar contra ellas es imprescincible contar con todos los nutrientes necesarios provenientes de una dieta variada y equilibrada.

Los antioxidantes son las sustancias que, de forma natural, usa el organismo para protegerse del daño generado por el metabolismo, la luz solar y la polución

De los órganos del cuerpo, la piel es la que más adversidades sufre en este sentido porque tiene otra amenaza extra cada día: la radiación ultravioleta. Por este motivo, cualquier déficit vitamínico o nutricional en el cuerpo se manifiesta rápidamente en la piel. 

Un buen cosmético puede ser de gran ayuda a la hora de combatir este daño, sin embargo, es complicado que a través de una crema se absorba toda la cantidad necesaria de antioxidantes y muchas veces es necesaria la suplementación oral.

En opinión de la Dra. Virginia Sánchez, "Muchos estudios tratan de solucionar este problema y se están consiguiendo productos de gran interés. Cada vez son más los nutricosméticos han demostrado gran efectividad como complemento a una dieta completa y equilibrada".