La piel es el órgano más extenso del cuerpo y es habitual encontrase con manchas de diferentes tipos. Pero también es importante revisarlas, de manera que si nos encontramos con algún tipo de cambio en el color o en la textura acudamos a un dermatólogo. La Dra. Virginia Sánchez afirma que “se debe acudir a revisión dermatológica si notamos la aparición de cambios de color o de textura. Suelen producirse con mayor frecuencia en zonas concretas de la piel de la cara, escote o parte alta del tronco”.
La exposición solar es una de las mayores causas de la aparición de manchas por lo que lo más importante es siempre la fotoprotección oral y tópica, sobre todo en fototipos bajos (I-III).
Además las personas con más de 50 lunares tienen mayor riesgo de desarrollar un melanoma por lo que se aconseja una revisión anual por un dermatólogo o antes si hay cambios.
En estos casos estaría indicada la dermatoscopia digital, una técnica de examen de la piel que permite detectar lesiones con gran precisión diagnóstica.